El ciclismo indoor es una forma estupenda de aglutinar todos los beneficios del ciclismo cuando tienes una agenda apretada, disfrutando de un entorno divertido y ajeno a las inclemencias del tiempo. Usar zapatillas de ciclismo puede mejorar tus entrenamientos, pero para muchos, pedir prestadas unas zapatillas en el gimnasio es como alquilar unos zapatos en la bolera pero más sudados. A continuación te damos un par de consejos para que te compres tus propias zapatillas.
Zapatilla de carretera apta para caminar
Busca unas zapatillas que tengan las calas integradas en la base de la suela. Esto te permitirá caminar por el gimnasio o por tu casa cómodamente, sin resbalarte o arañar el suelo.
Cuando te las pruebes por primera vez, camina un poco con ellas. Con las zapatillas de ciclismo indoor debes tener sensación de seguridad y de cierta rigidez, pero sobre todo han de ser lo suficientemente cómodas como para poder caminar con ellas.
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Zapatillas específicas de carretera
Generalmente, las bicicletas estáticas de las salas de ciclismo indoor están equipadas con pedales compatibles con el sistema SPD de dos tornillos habitual en el ciclismo de montaña.
Sin embargo, en algunos gimnasios, utilizan pedales con el sistema de tres tornillos que se usa habitualmente en el ciclismo de carretera. Si no sabes qué sistema utiliza tu gimnasio, llama antes e infórmate.
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